Querido Frank:He recibido con gusto tu amable carta. Leía en los periódicos tu ausencia y confesaré que estaba preocupado. Finalizado el último amistoso en Sudáfrica contra el experimentado Mamelodi Sundowns, la tierra parecía haberte tragado. Te supongo en algún lugar de tu amada Holanda, disfrutando de unas anónimas vacaciones. Supongo que para un entrenador de primera línea internacional, el estío llega para recuperar una tranquilidad que, después de lo vivido, debe parecerte de una existencia imposible; tu amigo el italiano podría contarte mucho sobre ello.
No ha sido un buen año para ti. La engrasada maquinaria barcelonista ha funcionado por debajo de las revoluciones esperadas y sabes que una parte importante de esa responsabilidad es tuya; la otra quedaría repartida entre banas polémicas y lesiones inesperadas pero eso, ya es parte inseparable del fútbol. En Barcelona la afición mira la próxima temporada con esperanza; el accidente de la pasada liga no debe volver a ocurrir y la junta directiva -debería decir los técnicos deportivos?- parece que han hecho los deberes y los han hecho bien.
No será un año fácil. La atención de los medios de comunicación estará puesta sobre ti, más que nunca. El vestuario debe recuperar una tranquilidad que -artificial o natural- no obstaculice la marcha del equipo; todos sabemos que al fin y al cabo poco importa si los jugadores son amigos o, por el contrario, no se dirigen la palabra; en el campo se rinde y fuera de él, allá cada cual.
Apura tus días de reposo Frank. Los socios aún no hemos renunciado a ti. Esperamos que los tiempos venideros sean excitantes; te observo apoyado frente a un cartel que lleva escrito una de las mejores definiciones del destino que se avecina: "el gran repte" (el gran reto).
Un abrazo,
Firmado Socio 45,332
No ha sido un buen año para ti. La engrasada maquinaria barcelonista ha funcionado por debajo de las revoluciones esperadas y sabes que una parte importante de esa responsabilidad es tuya; la otra quedaría repartida entre banas polémicas y lesiones inesperadas pero eso, ya es parte inseparable del fútbol. En Barcelona la afición mira la próxima temporada con esperanza; el accidente de la pasada liga no debe volver a ocurrir y la junta directiva -debería decir los técnicos deportivos?- parece que han hecho los deberes y los han hecho bien.
No será un año fácil. La atención de los medios de comunicación estará puesta sobre ti, más que nunca. El vestuario debe recuperar una tranquilidad que -artificial o natural- no obstaculice la marcha del equipo; todos sabemos que al fin y al cabo poco importa si los jugadores son amigos o, por el contrario, no se dirigen la palabra; en el campo se rinde y fuera de él, allá cada cual.
Apura tus días de reposo Frank. Los socios aún no hemos renunciado a ti. Esperamos que los tiempos venideros sean excitantes; te observo apoyado frente a un cartel que lleva escrito una de las mejores definiciones del destino que se avecina: "el gran repte" (el gran reto).
Un abrazo,
Firmado Socio 45,332
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